5 olores indeseados

No importa qué tan guapo seas o tu cuerpo sea escultural, el mal olor mata cualquier atractivo, señala un estudio de la Universidad de Oxford donde varias mujeres observaron fotografías de hombres, “tramposamente” aromatizadas con un olor agradable y otras, con un olor fétido. Los chicos con un buen aroma evidentemente obtuvieron la mayor puntuación.

El mal olor después del ejercicio o el mal aliento por la mañana son algo natural, pero si presentas olores fuertes aún después del aseo personal, tienes que tomar otras medidas.

Mal olor en las axilas

Podría ser tan simple como cambiar tu rutina de baño diario. En primer lugar, utiliza un jabón líquido para cuerpo 2 en 1 (limpieza y exfoliación), como el jabón exfoliante para cuerpo de Kiehl, después de éste utiliza un desodorante que contenga zinc o aluminio que mantendrá a raya las bacterias causantes del mal olor. El doctor Eric Schweiger, dermatólogo de la empresa Schweiger Dermatology en Nueva York sugiere intentar probar un producto comercial del tipo clínico como el Rexona Clinical primeramente. Si esto no funciona, consulta a tu médico acerca de reemplazarlo por una opción más fuerte que requiera receta médica para un obtener un desodorante con Drysol.

Mal olor en la cabeza

Es probable que la causa sea una bacteria inofensiva que se encuentra en el cuero cabelludo, y lo más probable es que tu cabello no esté siendo lavado con un shampoo lo suficientemente astringente para eliminar la bacteria, señala la dermatóloga Marina Peredo en Smithtown, Nueva York. Así que asegúrate de enjabonarte y no sólo de enguajarte, y si estás empleando un shampoo rico en aceites vegetales para propósitos de acondicionamiento, cámbialo por un clarificante que contenga azufre, zinc o alquitrán, como el Neutrogena. “Estos ingredientes ayudan a eliminar el exceso de grasa, eliminan el mal olor y dejan una sensación más fresca y limpia”, asegura Peredo. Para un cuero cabelludo extremadamente limpio, la médica también sugiere que se omita el acondicionador o (para aquellos que traen cabello largo) utilizarlo solamente en los puntas de tu cabello.

Mal aliento

Tu primera parada debería ser con un dentista: “El mal aliento es causado principalmente por la descomposición de las partículas de comida que se quedan en la boca”, explica Joseph Banker, odontólogo del Centro Clínica Dental en Westfield, Nueva Jersey. Aparte de simplemente darte una buena limpieza, tu dentista revisará si tienes caries, enfermedades en las encías, y algo llamado “bajo flujo salival”, todos causantes del mal olor que escapa de tu boca. Tu dentista también podría aconsejarte un mejor sistema de limpieza en casa. Para sus pacientes, Banker típicamente recomienda una rutina de constante de cepillado y uso de hilo dental después de las comidas, un enjuague antibacterial como Listerine, y algo llamado “raspador de lengua”, que removerá cualquier bacteria y las células en descomposición.

Olor ahí abajo

Bien, todos los hombres tienen una esencia particular debajo del cinturón. Pero cuando notas un nuevo olor o éste se torna más fuerte o apestoso, incluso después de bañarte, algo está pasando. Lavarse con un jabón antibacterial es obviamente importante (por la mañana, por la noche, y después del ejercicio), pero secarse completamente y evitar la humedad durante todo el día es crucial en lo que se refiere a una lucha contra las bacterias que causan el mal olor y la proliferación de hongos. De modo que aplica talco de bebé mezclado con talco deportivo para tiña en la ingle para absorber la humedad y refrescar tu esencia, corta el vello púbico para reducir la sudoración, y usa ropa interior de algodón ligero, que permite respirar a la piel. (Si aún no mejora, consulta a tu médico, quien podría sugerirte un tratamiento que requiera prescripción médica).

Olor de pies

Lo primero que hay que diferenciar es un posible olor de pies o un posible olor del calzado. Son dos circunstancias completamente distintas aunque suelen estar relacionadas ya que el olor será incomodo en ambos casos suele venir producido generalmente por un exceso de sudoración de nuestros pies. Hay que tener en cuenta que cada persona es un mundo y de la misma manera que unas personas tienen un olor corporal más fuerte y otras no, con los pies ocurre exactamente lo mismo. Este olor viene producido por el calor acumulado, por la condensación que se produce dentro del calzado y también por el material del que esté hecho el calzado. Un truco para que nuestro calzado pierda ese olor tan característico es dejar un puñado de bicarbonato dentro de nuestro calzado durante un par de días y después retirarlo.